viernes, 16 de septiembre de 2011

Cambios que te cambian y nuevos comienzos.


Supongo que esa noche dormistes poco y mal, porque por la mañana temprano, a las 7 de la mañana, más o menos, aparecistes frotándote los ojos y me pedistes que te ayudara a ponerte la ropa y prepararte "al punto" para llegar al colegio rápido.

Los dos andábamos un poco despistados a nuestro regreso de Almería ese fin de semana. El colegio empezó el jueves anterior, el día 8 de septiembre, pero tú empezastes el lunes, día 12 y yo andaba despierto a esas horas porque pensaba que tenía que ir al trabajo esa mañana, pero al llegar a la oficina me dijeron que hasta la tarde no tenía que ir; regresé a casa y pude acompañarte en tu primer día de primaria.

Tu madre y yo hicimos apuestas pensando cuál sería el día en que tu profesora nos llamaría para hacer alguna tutoría por tu comportamiento. Lo hicimos, porque con la llegada de tu hermano, este verano había sido un poco más movidito de lo normal para tí y todos lo notábamos.

Pero una vez más has podido sorprender a tus padres. Ha llegado el viernes, ¡tu primera semana en 1º de primaria y tu profesora no nos ha llamado!

Muchos cambios sí, pero con ese corazón y esa fuerza que tienes, vas a poder con todo lo que te propongas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario